En redes sociales está circulando un afiche sobre el supuesto contenido de las vacunas. El folleto muestra una serie de componentes tóxicos -como el aluminio, el mercurio o el formaldehído- para el cuerpo humano que tendrían las inoculaciones.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), en su sitio web, explica que “todas las vacunas aprobadas son sometidas a pruebas rigurosas a lo largo de las diferentes fases de los ensayos clínicos”, añadiendo que “la mayoría de las reacciones a las vacunas son leves y temporales, tales como el dolor en el lugar de inyección o la febrícula (fiebre prolongada, moderada, casi siempre vespertina, de origen infeccioso o nervioso)”.
Por otro lado, para saber si realmente las vacunas contienen lo que asegura el afiche, Decodificador Chile consultó al químico farmacéutico de la Universidad Católica y especializado en el área de las vacunas, José González, sobre los componentes abordados en el afiche.
¿Qué contienen las vacunas?
González partió explicando que es clave la cantidad de una sustancia para determinar si es dañina o no para el ser humano. “El agua es súper sana, pero si alguien se toma más de cinco litros en un momento, puede llegar a morir por ingerir agua”.
En ese sentido, González explicó que en una vacuna puede haber cuatro componentes básicos: antígenos, adyuvantes, preservantes y un líquido en suspensión.
La beta propiolactona, que aparece en el afiche, sirve para crear el antígeno, es decir, desactivar el virus para que el organismo pueda reconocerlo, señaló González. “Una vez que se inactiva este virus, se retira esta molécula a través de procesos de purificación”, añadió.
El aluminio, que según el afiche está presente en una vacuna y puede causar daño cerebral, realmente puede estar presente en algunas vacunas como sales de aluminio, que se utilizan como adyuvante (una molécula que ayuda a reconocer mejor el virus).
“A las sales de aluminio se les llama adyuvante universal, porque se usan en todas partes del mundo. Se utiliza en cantidades muy pequeñas y no produce ningún problema en el ser humano al ser inyectado” señala González.
En cuanto al mercurio, se trata de timerosal o -químicamente- etilmercurio, el cual funciona como preservante. Según González, “ayudan a evitar el crecimiento de bacterias y hongos de algunas vacunas que son activadas. En su composición tiene una molécula de mercurio, pero su toxicidad es muy baja”.
En la categoría de preservantes entran una serie de elementos químicos que el afiche califica como peligrosos, tales como el monosodio de glutamato, fenol, formaldehido, glutaraldehido y antibióticos.
González recalca que todos estos componentes pueden estar presentes, pero “en dosis muy pequeñas para impedir la contaminación o degradación de la vacuna” y no representan un riesgo para el cuerpo humano.
¿Células animales y humanas?: se trata de cultivos celulares
Para la fabricación del antígeno, es posible que se empleen cultivos celulares en ambientes artificiales. Según una nota de Maldita.es, pueden ser de procedencia animal o humana.
El procedimiento es la extracción de muestras de un órgano, donde se seleccionan las células requeridas. Las células resultantes son descendientes de las que estuvieron en el órgano y nunca formaron parte de él.
El medio español aclara que si bien «es cierto que el uso de líneas celulares humanas es un debate ético válido, la realidad es que no hay ADN de fetos en las vacunas».
A continuación, te presentamos una tabla con todos los elementos consultados detalladamente:
Elemento: Aluminio
AFICHE | EXPERTO |
Causa daño en el cerebro en todas las dosis. Asociado al Alzheimer. | FALSO: Se ocupan sales de aluminio en ciertas vacunas. Es una dosis tan pequeña que no representa riesgo. |
Elemento: Beta-propiolactona
AFICHE | EXPERTO |
Causa cáncer. Se sospecha de daño gastrointestinal, hígado, nervios y otros. | FALSO: Molécula utilizada para inactivar el virus. Se usa para el covid-19, influenza, rabia, entre otros. Una vez que se utiliza, se retira por un proceso de purificación. |
Elemento: Mercurio
AFICHE | EXPERTO |
Dosis pequeñas causan daño al cerebro, estómago, riñones, entre otros. | FALSO: Se utiliza timerosal en algunas vacunas, el cual contiene una molécula de mercurio, pero su toxicidad es muy baja. |
Elemento: Gentamicin Sulphate y polymyxin b
AFICHE | EXPERTO |
Reacción alérgica que puede causar la muerte | ENGAÑOSO: Algunos tipos de antibióticos pueden usarse como preservante. Su cantidad es mínima y no dañina. |
Elemento: Levadura modificada genética
AFICHE | EXPERTO |
Causa daños genéticos desconocidos. | ENGAÑOSO: Para multiplicar el antígeno se utilizan organismos unicelulares o cultivos celulares, que son organismos vivos. |
Elemento: Glutaraldehido
AFICHE | EXPERTO |
Es venenoso si se ingiere. | ENGAÑOSO: Se pueden utilizar conservantes como estos en algunas vacunas. La cantidad que se utiliza es inofensiva. |
Elemento: Formaldehído
AFICHE | EXPERTO |
Causa cáncer. Está prohibido en varios países. | ENGAÑOSO: Se pueden utilizar conservantes como estos en algunas vacunas. La cantidad que se utiliza es inofensiva. |
Elemento: Glutamato de monosodio
AFICHE | EXPERTO |
Relacionado con defectos de nacimiento | ENGAÑOSO: Se pueden utilizar conservantes como estos en algunas vacunas. La cantidad que se utiliza es inofensiva. |
Elemento: Sulfato de neomicina
AFICHE | EXPERTO |
Puede causar epilepsia y daño cerebral | ENGAÑOSO: Se pueden utilizar conservantes como estos en algunas vacunas. La cantidad que se utiliza es inofensiva. |
Elemento: Fenol
AFICHE | EXPERTO |
Tóxico para las células. Capacidad de destruir el sistema inmune. | ENGAÑOSO: Se pueden utilizar conservantes como estos en algunas vacunas. La cantidad que se utiliza es inofensiva. |
Elemento: Polisorbato
AFICHE | EXPERTO |
Reconocido que causa cáncer en animales. | FALSO: Funciona como adyuvante. (Nota del autor: Estudios han descartado que sea tóxico). |
Elemento: Células de animales y humanos
AFICHE | EXPERTO |
Relacionado con la leucemia y la diabetes infantil. | ENGAÑOSO: En el proceso de fabricación de los antígenos se utilizan cultivos celulares de procedencia animal o humana para reproducir estos antígenos, pero la realidad es que no hay ADN de fetos en las vacunas. |